Qué son las cookies y por qué son importantes

Cuando navegas por internet, seguro te has topado con mensajes que dicen algo como «este sitio utiliza cookies para mejorar tu experiencia». A veces, solo le das clic a «Aceptar» sin pensarlo mucho. Pero, ¿te has preguntado qué son exactamente esas cookies y por qué todos los sitios las usan?

Las cookies son como pequeños ayudantes invisibles que hacen que tu experiencia en la web sea más fluida y personalizada. Sin ellas, tendrías que ingresar tu usuario y contraseña cada vez que visitas una página o perderías los productos de tu carrito de compras si cierras la ventana. Ahora, vamos a desglosar qué son estas pequeñas herramientas y cómo funcionan.

¿Qué es una cookie?

Imagínate que entras a una cafetería y el barista recuerda tu nombre y tu café favorito sin que tengas que decir nada. Bueno, las cookies funcionan de manera similar en internet. Una cookie es un pequeño archivo que se guarda en tu dispositivo cuando visitas un sitio web. Este archivo guarda información sobre ti, como tus preferencias y comportamientos de navegación, para mejorar tu experiencia la próxima vez que visites esa página.

¿Para qué sirven las cookies?

Las cookies tienen varias funciones útiles que hacen que tu navegación por la web sea mucho más sencilla y personalizada. Aquí te explicamos cómo:

Recordar tus accesos y credenciales

¿Alguna vez te has preguntado por qué no tienes que volver a escribir tu nombre de usuario y contraseña cada vez que visitas tus sitios favoritos? Eso es gracias a las cookies. No tienes que introducir tus datos cada vez que entras. Imagina tener que recordar y escribir tu nombre de usuario y contraseña cada vez que visitas Facebook, tu correo electrónico o tu tienda online favorita. Las cookies se encargan de guardar esta información por ti, haciendo que el proceso de inicio de sesión sea mucho más rápido y sin complicaciones.

Guardar tus preferencias

Si estás comprando en una tienda online y ves algunos productos interesantes, las cookies pueden recordar esos artículos para mostrártelos más adelante. Supón que estás en una tienda de ropa y agregas un par de camisetas y unos jeans a tu carrito, pero no completas la compra. Al regresar más tarde, las cookies se aseguran de que esos artículos sigan en tu carrito, listos para ser comprados. Además, si prefieres ver el sitio en modo oscuro o en un idioma específico, las cookies recordarán estas preferencias para que no tengas que configurarlas cada vez que vuelvas.

Mostrarte publicidad relevante

Las cookies pueden rastrear tus hábitos de navegación para mostrarte anuncios relacionados con tus intereses. Si has estado buscando zapatillas de deporte, no te sorprendas si ves anuncios de calzado en otros sitios. Esto sucede porque las cookies guardan información sobre las páginas que visitas y los productos en los que te interesas. Así, cuando visitas otros sitios web, los anunciantes pueden mostrarte anuncios que son más relevantes para ti, en lugar de publicidad genérica que probablemente ignorarías.

Además de estas funciones, la información recopilada por las cookies es muy valiosa para los administradores de sitios web. Les ayuda a entender cómo se usa su página, qué secciones son más visitadas y si hay problemas que necesitan solucionar. Con estos datos, pueden mejorar el rendimiento del sitio y ofrecer una mejor experiencia a todos los usuarios. Por ejemplo, si notan que muchas personas abandonan una página de pago antes de completar una compra, pueden investigar por qué ocurre esto y hacer los ajustes necesarios para mejorar el proceso.

Tipos de cookies

Hay varios tipos de cookies, cada una con un propósito diferente. Vamos a desglosarlas con ejemplos específicos para que puedas entender mejor cómo funcionan.

1. Cookies de sesión: Estas cookies mantienen activa tu sesión mientras navegas. Por ejemplo, imagina que estás en una tienda online y añades varios productos a tu carrito de compras. Las cookies de sesión se aseguran de que esos productos sigan en tu carrito mientras sigues explorando la tienda, incluso si pasas de una sección a otra o cierras temporalmente la página.
2. Cookies persistentes: Estas almacenan información para futuras visitas. Supón que visitas un sitio web de noticias y siempre prefieres leer en modo oscuro y en español. Las cookies persistentes se encargan de recordar estas preferencias, así que no tienes que configurar el sitio cada vez que vuelves. Además, pueden recordar tus datos de inicio de sesión, para que no tengas que escribir tu usuario y contraseña cada vez que entres.

Cookies según su funcionalidad

Cookies de origen

Estas son creadas directamente por el sitio web que estás visitando. Por ejemplo, si estás navegando por Amazon, las cookies de origen son aquellas creadas por Amazon para recordar tus preferencias de productos, historial de búsqueda y configuración de la cuenta.

Cookies de terceros

A diferencia de las cookies de origen, estas son creadas por servicios externos, como anunciantes. Por ejemplo, si ves un anuncio de zapatillas Nike mientras navegas por un blog de deportes, es probable que esa cookie haya sido creada por Nike o por una plataforma publicitaria para rastrear tu interés en sus productos.

Cookies de seguridad

Estas cookies ayudan a identificar y prevenir errores de seguridad. Por ejemplo, si estás haciendo una transacción bancaria en línea, las cookies de seguridad pueden detectar y bloquear intentos de inicio de sesión sospechosos o prevenir el acceso no autorizado a tu cuenta.

Cookies de rendimiento

Recopilan datos para mejorar la experiencia de navegación y rendimiento del sitio. Por ejemplo, si un sitio web de streaming de video como Netflix usa cookies de rendimiento para medir qué tan rápido se cargan los videos y si hay interrupciones frecuentes. Esta información les ayuda a mejorar la calidad del servicio.

Cookies de funcionalidad

Estas cookies recuerdan tus acciones y hábitos para personalizar futuras visitas. Por ejemplo, si en Spotify siempre escuchas música de un género específico, las cookies de funcionalidad ayudan a recordar tus preferencias y te sugieren nuevas canciones o artistas relacionados con tus gustos.

Cookies de redes sociales

Facilitan compartir contenido en redes sociales y rastrean tu actividad en diferentes plataformas. Por ejemplo, si lees un artículo interesante y quieres compartirlo en Facebook, las cookies de redes sociales permiten que este proceso sea fluido. También pueden rastrear tu actividad para mostrarte contenido relevante en tus redes sociales.

Cookies de publicidad y targeting

Estas cookies se usan para mostrarte anuncios relevantes basados en tus intereses y hábitos de navegación. Por ejemplo, si has estado buscando información sobre viajes a Japón, no te sorprendas si comienzas a ver anuncios de agencias de viajes o promociones de vuelos hacia Tokio en otros sitios que visites.

En resumen, cada tipo de cookie tiene su propia función específica para mejorar tu experiencia en línea de diferentes maneras. Desde mantener tus productos en el carrito hasta mostrarte anuncios relevantes, las cookies son herramientas esenciales para una navegación web más personalizada y eficiente.

Cómo adaptar tu web a la política de cookies actual

Con la llegada del RGPD (Reglamento General de Protección de Datos) y la LOPD (Ley Orgánica de Protección de Datos), ahora es obligatorio que los usuarios acepten las cookies para que se puedan almacenar en sus dispositivos. Básicamente, ya no puedes simplemente lanzar cookies a la computadora de alguien sin preguntar primero. Aquí te explicamos cómo cumplir con estas políticas de manera efectiva y sencilla.

Para cumplir con estas políticas, debes seguir estos pasos:

Conocer las cookies que usas

Antes de todo, necesitas saber exactamente qué tipo de cookies estás utilizando en tu sitio web y para qué sirven. Haz una lista detallada de cada cookie, su propósito y su duración. Por ejemplo, identifica si tienes cookies de sesión que mantienen a los usuarios conectados, cookies persistentes que recuerdan las preferencias de idioma, o cookies de terceros que rastrean el comportamiento del usuario para mostrar publicidad. Conocer esta información es el primer paso para la transparencia.

Informar al usuario

Una vez que sepas qué cookies usas, debes informar a tus usuarios de manera clara y transparente. Crea una política de cookies accesible desde cualquier página de tu sitio, donde expliques qué cookies utilizas y por qué. Por ejemplo, podrías decir: «Usamos cookies de sesión para mantenerte conectado mientras navegas por nuestro sitio y cookies de publicidad para mostrarte anuncios relevantes». Sé directo y evita el lenguaje técnico complicado. La idea es que cualquiera pueda entender para qué son y cómo se usan las cookies en tu sitio.

Obtener el consentimiento del usuario

Antes de almacenar cualquier cookie en el dispositivo del usuario, necesitas obtener su consentimiento explícito. Esto generalmente se hace mediante un banner o un pop-up que aparece cuando alguien visita tu sitio por primera vez. Este mensaje debe explicar brevemente que usas cookies, dar un enlace a tu política de cookies, y ofrecer botones claros para «Aceptar» o «Rechazar». Por ejemplo: «Este sitio utiliza cookies para mejorar tu experiencia. Lee nuestra política de cookies para más información. ¿Aceptas el uso de cookies? [Aceptar] [Rechazar]».

Permitir cambios en cualquier momento

No basta con obtener el consentimiento una vez. Los usuarios deben poder cambiar sus preferencias de cookies en cualquier momento. Esto significa que necesitas un sistema que permita a los usuarios acceder y modificar sus configuraciones de cookies fácilmente. Por ejemplo, incluye un enlace en el pie de página de tu sitio que diga «Configuración de cookies», donde los usuarios puedan ajustar sus preferencias, aceptar nuevas cookies o eliminar las que ya han aceptado.

Diferencia entre aceptar o rechazar las cookies

Aceptar o rechazar las cookies tiene sus pros y sus contras:

• Aceptar cookies: Si aceptas las cookies, tu experiencia de navegación será más personalizada. Los sitios pueden recordar tus preferencias y mostrar contenido que te interese.
• Rechazar cookies: Si decides no aceptar las cookies, perderás algunas funcionalidades personalizadas, pero ganarás en privacidad.

En la Escritoría, nos enfocamos en lo que mejor sabemos hacer: crear contenidos impactantes que mezclan la creatividad humana con la inteligencia artificial. Aunque no nos encargamos de la configuración de cookies ni de los textos legales, entendemos la importancia de estos detalles para ofrecer una experiencia web óptima.

Deja que nosotros nos encarguemos de atraer y enamorar a tu audiencia con artículos de blog, posts para redes sociales y newsletters irresistibles. Mientras tanto, puedes trabajar en adaptar tu sitio a las políticas de cookies actuales para garantizar la seguridad y confianza de tus usuarios. Juntos, podemos hacer que tu presencia en línea sea no solo legal, sino memorable.