¿Qué es el email marketing? Vamos a hablar de ello

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¿Por qué debería importarte el email marketing?

Aquí va la cosa: el email marketing es como ese amigo fiel que, aunque no esté de moda, siempre está ahí para apoyarte. Lleva décadas entre nosotros, pero sigue siendo un crack adaptándose y marcando goles en el partido del marketing digital. Ya seas una marca emergente o una empresa consolidada, meter al email marketing en tu equipo es jugar en primera división.

Ahora, tener las herramientas no significa saber usarlas. Muchos tienen un taladro, pero eso no los hace carpinteros. Con el email marketing pasa igual: si no sabes lo que haces, tu mensaje se pierde en el mar de spam, molestando más de lo que ayuda.

¡Pero tranqui! Estás a punto de convertirte en el Messi del email marketing. Vamos a desglosar esto en una guía: qué es, cómo puede elevar tu marca, su papel en el viaje de tus usuarios, cómo armar tu estrategia y, por supuesto, cómo hacer que tus emails sean tan esperados como el viernes por la tarde.

Entonces, ¿Qué es el email marketing?

Imagina que puedes susurrarle al oído a tus usuarios, personalizando lo que les dices para que se queden con la boca abierta. Eso es el email marketing: tu canal directo para enviar mensajes al buzón personal de tu audiencia, ajustando el contenido a sus intereses y necesidades, buscando desde atraer a nuevos fans hasta mantener a los veteranos pegados a tu marca.

Y ojo, que esto no es solo lanzar anzuelos a ver quién pica. El email marketing es un juego de estrategia que se adapta a todas las situaciones. Desde emails de bienvenida que abren la puerta a nuevos clientes, newsletters que mantienen viva la llama, hasta correos de fidelización que hacen que tus clientes vuelvan una y otra vez.

¿Captación o fidelización? Esa es la cuestión

Aquí entramos en terreno táctico: hay dos grandes ligas en el email marketing, y cada una juega un papel crucial.

Email marketing de captación

Piénsalo como el primer café con alguien que te interesa: quieres impresionar, mostrar lo mejor de ti y, por supuesto, conseguir una segunda cita. Aquí, el objetivo es llamar la atención, despertar curiosidad y, finalmente, convertir a ese desconocido en un miembro más de tu club de fans.

Imagina que estás en una cafetería, y al otro lado de la mesa está tu crush. No vas a empezar hablando de matrimonio o de cuántos hijos quieres tener, ¿verdad? Primero, le cuentas esa anécdota graciosa que te hace ver interesante, luego le dejas ver un poquito de tu corazón hablando de tus pasiones. Así, poco a poco, vas construyendo una conexión.

En el mundo del email marketing de captación, este proceso es igual. Supongamos que tienes una tienda de camisetas personalizadas. Tu primer correo podría ser algo así como «5 maneras de destacar en tu próximo evento», donde ofreces consejos útiles sin venderles nada directamente. Despiertas su interés y, lo más importante, dejas que te conozcan. Es como esa primera charla en la cafetería: les estás mostrando por qué valdría la pena tener una segunda cita contigo, o en este caso, abrir tu próximo correo.

Recuerda, el objetivo aquí no es pedirles que compren de inmediato, sino hacer que quieran volver a saber de ti. Al igual que en una cita, quieres que al final del café, estén pensando, «Wow, realmente me gustaría volver a ver a esta persona».

Email marketing de fidelización

Ya tienen tu número y han dicho que sí a esa segunda cita. Ahora, ¿cómo haces para que no se cansen de ti? Manteniendo viva la chispa, ofreciendo contenido que les interese, recompensas que les emocionen y, en definitiva, haciéndoles sentir parte de algo especial.

Imagínate que ya han pasado esas primeras citas, y ahora estás intentando que la relación pase al siguiente nivel. No se trata de hacer lo mismo una y otra vez; se trata de mantener las cosas frescas, interesantes. Supongamos que tu pareja ama la música. ¿Qué tal si un día llegas con entradas sorpresa para ver a su banda favorita? Eso es lo que llamamos un movimiento maestro en la fidelización.

Traducido al email marketing, esto significa enviar correos que mantengan a tus suscriptores al borde de sus asientos, esperando ver qué es lo próximo que les vas a ofrecer. Digamos que gestionas una aplicación de meditación. Podrías enviar un email titulado «Descubre el poder de meditar bajo la luna llena», incluyendo una lista de reproducción especial para esa noche y una invitación a un evento online exclusivo para suscriptores. Aquí no solo estás ofreciendo contenido de valor; estás creando una experiencia única que los hace sentir parte de un club exclusivo.

Este enfoque transforma el email marketing de ser solo una herramienta de comunicación a ser una experiencia que tus usuarios esperan con ansias. En resumen, es hacerles saber constantemente que te importan, que piensas en ellos, y que estás allí para sorprenderlos y deleitarlos, no solo para venderles algo. Así es como mantienes la llama encendida, convirtiendo a suscriptores ocasionales en fans leales para toda la vida.

Ambas estrategias son el yin y el yang de tu plan de email marketing: una te ayuda a crecer, y la otra mantiene fuerte esa relación a largo plazo.

Los beneficios del email marketing

Es como encontrar dinero en el sofá

Imagina que estás limpiando tu sofá y, entre las almohadillas, encuentras un billete de 50 euros. Así de genial es el email marketing: inviertes un poco en crear buenos contenidos y la plataforma adecuada, y de repente, ¡zas!, las ventas y el engagement empiezan a multiplicarse. Sin tener que vaciar los bolsillos, ves cómo tu inversión inicial se convierte en beneficios que realmente se notan.

Hubspot nos tira este datito: puedes esperar un retorno de inversión del 4300%. O sea, que por cada euro que metas, podrías sacar 43. ¡Eso es multiplicar tu dinero como por arte de magia!

Tu voz en su cabeza

Piensa en ese amigo que siempre sabe cómo y cuándo decirte exactamente lo que necesitas oír. El email marketing te permite ser ese amigo para tus clientes. A través de mensajes personalizados, puedes hablarles directamente, manteniendo tu marca presente en su mente de manera constante, como una conversación continua que fluye naturalmente.

Hecho a medida

¿Alguna vez recibiste un regalo que parecía hecho exclusivamente para ti? Esa sensación de «esto es perfecto para mí» es lo que logras con la personalización en el email marketing. No es solo un «Hola, [y el nombre de tu cliente]». Va más allá, adaptando el contenido según lo que sabes de ellos: sus gustos, compras anteriores, incluso su cumpleaños. Les haces sentir especiales y únicos, lo cual, seamos sinceros, a todos nos encanta.

Ponlo en piloto automático

¿Recuerdas cuando programaste por primera vez el grabador de vídeo para que registrara tus programas favoritos mientras no estabas en casa? La automatización del email marketing es similar, pero mucho más potente. Configuras tus campañas, segmentas tus listas, y luego dejas que el sistema envíe los correos por ti, en el momento perfecto. El 47% de los marketers asegura que la automatización vale cada centavo por su relación costo-beneficio. Es como tener un equipo de marketing trabajando las 24 horas del día, sin necesidad de que estés ahí para dar cada paso.

Medir para saber

Imagina que estás afinando tu playlist para una fiesta. Quieres saber qué rolas prenden la pista y cuáles hacen que tus amigos se sienten. Con el email marketing, es igual. Aquí no hablamos de canciones, sino de métricas como la tasa de rebote y el porcentaje de clics (CTR).

Entender estas métricas te permite ajustar tu estrategia, como cambiar la música si ves que la pista de baile se vacía. Si tus números no están donde quieres que estén, experimenta con los asuntos de tus correos, prueba diferentes tipos de contenido, o ajusta la frecuencia de envío. Piensa en cada campaña de email como una fiesta que estás planeando: quieres que todos se la pasen genial, desde el momento en que reciben la invitación hasta el último baile.

Interactivo y dinámico

Recuerda la primera vez que viste un GIF en un correo electrónico. Fue como, «¿Qué es esta brujería?». Ahora, puedes hacer que tus emails cobren vida de maneras aún más sorprendentes. Encuestas que se pueden responder directamente desde el correo, videos que se reproducen al abrirlo, incluso pequeños juegos. Cada email se convierte en una experiencia única que tus suscriptores esperarán con ansias. ¿Sabías que incluir videos en tus emails puede aumentar las tasas de clic en un 65%?

Un camaleón

Piensa en el email marketing como un actor camaleónico, capaz de transformarse para encajar en cualquier papel. ¿Necesitas atraer a nuevos clientes? Hay un email para eso. ¿Quieres aumentar las ventas? También hay un correo para ello. Desde el conocimiento de la marca hasta la fidelización post-compra, el email marketing puede cambiar su enfoque para cumplir con tus objetivos en cada etapa del viaje del cliente. Es la herramienta todoterreno que se ajusta a tus necesidades, sea cual sea el escenario.

El email marketing y su papel estrella en el embudo de conversión

Desde el primer «Hola, ¿qué tal?» hasta el «No puedo vivir sin ti», el email marketing te acompaña en cada paso del camino, adaptando su mensaje para captar, convencer y convertir a los usuarios en fans leales.

Fase TOFU o «top of the funnel»

Aquí acabas de conocer al usuario. Está curioseando, buscando respuestas. Tu papel es ser ese amigo que aparece con una solución genial, ofreciéndole contenido valioso a cambio de su correo. Así, te abres paso suavemente en su bandeja de entrada.

Piénsalo como cuando llegas a una fiesta donde no conoces a nadie. Ves a alguien buscando desesperadamente el abridor de botellas. Tú, casualmente, llevas uno en el llavero. Lo sacas, abres su cerveza y ¡bam!, de repente eres el héroe de la noche. Esa es tu introducción, tu momento de «¡Aquí estoy yo para ayudarte!»

En el email marketing, esto es como enviar un primer correo que diga: «10 trucos infalibles para ahorrar en tus compras online». No estás vendiendo nada, solo estás ofreciendo una llave (en este caso, información útil) que abre la botella de sus necesidades o curiosidades. Es una forma suave pero efectiva de decir, «Hola, puedo ser útil para ti». Y justo así, ganas un clic y tal vez, un suscriptor que quiere seguir escuchándote.

Fase MOFU o «middle of the funnel»

Ahora que el usuario ya sabe quién eres y te ha echado un ojo, es hora de subir el telón y mostrarle por qué eres la estrella del show. Piénsalo: estás en ese punto de la cita donde ya captaste su interés, y ahora quieres demostrarle que eres material para algo serio. Aquí es donde el email se convierte en tu mejor amigo para seducirlo.

Utiliza el email para pasarle notas secretas que nadie más ve, como esa entrevista donde cuentas el secreto detrás de tu éxito, una guía paso a paso para resolver un problema común de manera magistral, o esos testimonios de fans que no pueden vivir sin tu marca. Es como invitarlo a mirar detrás de la cortina y ver todo el espectáculo preparado solo para él.

En esta fase, cada correo es un acto de equilibrio: quieres ser informativo, pero también irresistible. Piensa en esos correos como tus mejores anécdotas, compartidas en el momento justo para hacer que tu cita piense: «Wow, definitivamente quiero seguir viendo a esta persona».

Fase BOFU o «bottom of the funnel»

¡Aquí estamos! En la línea de meta, listos para que nuestro casi cliente se convierta en un fan incondicional. Imagina que estás en esa cita que ha ido de maravilla, y ahora, justo antes de despedirse, le das un motivo irresistible para querer verte de nuevo. Eso es lo que haces en la fase BOFU con tus emails: ofertas que no pueda rechazar, demostraciones gratuitas que sean el equivalente a un «te llamo y quedamos de nuevo».

En este punto, lanzas tu mejor jugada promocional, esa oferta exclusiva o ese acceso VIP a tu servicio que haga que dar el paso de compromiso sea un no-brainer. Es tu momento de decir: «Sé que te gusta lo que ves, así que aquí tienes un poco más para asegurarnos de que esto se convierta en una relación a largo plazo».

Pero, oye, que esto no suene a despedida. Convertir a alguien en cliente no es el final de la fiesta, sino el inicio de una relación que puede ser épica. El email marketing no se guarda en el cajón una vez que consigues esa venta; se transforma en tu herramienta para seguir construyendo ese vínculo, para sorprender, para agradecer, para fidelizar. Es tu canal directo para asegurarte de que esa chispa inicial se convierta en una llama duradera.

Cómo crear tu estrategia de email marketing sin perder la cabeza

Define tus metas: Imagínate que tu objetivo es aumentar las ventas de tu nueva línea de zapatillas un 20% en los próximos tres meses. Tienes que ser específico: «Quiero que mi tasa de conversión de los emails de promoción de zapatillas aumente del 2% al 2.4%». Esto te da un blanco claro hacia el cual apuntar.
Plan de juego: Digamos que decides que los newsletters semanales van a ser tu estrategia estrella. No cualquier newsletter, sino uno que cuente la historia detrás de cada diseño de zapatilla, mostrando el arte y la inspiración detrás de cada par. Y para los más fieles, ¿qué tal un código de descuento que solo pueden conseguir a través de este correo? Estás construyendo un club exclusivo, y todos querrán ser parte.
Captura esos correos: Piensa en algo tan irresistible como un sorteo de un año de zapatillas gratis, una por mes. Para entrar, la gente necesita suscribirse con su correo. O quizás, un quiz interactivo sobre qué tipo de zapatillas van con su personalidad, y al final, para ver los resultados, ¡pum!, necesitan darte su correo. Es como decir «dame tu correo y te doy algo genial a cambio».
Automatiza y personaliza: Utiliza una herramienta que te permita enviar un correo de bienvenida personalizado tan pronto alguien se suscribe. Pero no un simple «Hola», sino algo como «Hola [nombre], bienvenido al club donde tus pies nos importan tanto como a ti». Y si sabes que prefieren zapatillas para correr, personaliza los siguientes correos con contenido y ofertas específicas para corredores. Es como tener un asistente personal para cada uno de tus clientes.
Mide, ajusta, repite: Supongamos que lanzaste tu campaña de email para las zapatillas. Al principio, notaste que los emails enviados los martes tienen una tasa de apertura mayor que los enviados los viernes. ¿Qué haces? Ajustas tu calendario para enviar los correos más importantes los martes. Y si ves que los emails con videos tienen un CTR más alto, empiezas a incluir más contenido en video. Es un baile constante, donde cada paso se ajusta según la música del momento, es decir, la respuesta de tus suscriptores.

10 mandamientos para un buen email marketing

Conoce a tu tribu: Entiende a fondo a quién le estás hablando.
Personalización al máximo: Haz que cada usuario sienta que le hablas solo a él.
Experimenta con A/B tests: Pequeños cambios pueden significar grandes resultados. Prueba y aprende.
Asuntos que enganchen: Tu asunto decide si tu email se abre o se ignora.
Directo al grano: Los emails largos y enredados son para otros. Sé claro y conciso.
Hazlo social: Facilita que compartan tu contenido en redes.
Sin distracciones: Cada email tiene una misión. Que nada le quite el foco.
Llamadas a la acción visibles: No hagas que tus usuarios busquen dónde clickear.
Que se vea bien en todas partes: Desde un smartphone hasta una PC vieja, tu email debe lucir impecable.
Respeta su espacio: Encuentra el balance perfecto en la frecuencia de tus envíos.

Conclusión

El email marketing es como ese amigo que nunca falla, pero para que realmente haga magia, necesita de tu parte un toque de creatividad, personalización y estrategia. Ahí es donde entra la Escritoría, nuestra agencia de marketing digital que combina lo mejor de dos mundos: la creatividad humana y el poder de la inteligencia artificial. Imagina tener un equipo que no solo entiende los entresijos del email marketing, sino que también utiliza la tecnología más avanzada para asegurarse de que cada correo electrónico sea una experiencia única para quien lo recibe. En la Escritoría, no solo enviamos emails, creamos conexiones profundas entre marcas y personas, aprovechando cada oportunidad para que tu mensaje no solo sea leído, sino recordado y valorado. Únete a nosotros y veamos juntos cómo tu estrategia de email marketing puede realmente brillar en el mundo digital.

Preguntas frecuentes sobre email marketing

¿Por qué es importante segmentar mi lista de correo?

Piénsalo como si estuvieras preparando una playlist para diferentes tipos de fiesta. No vas a poner el mismo rollo en una fiesta de cumpleaños que en una cena tranquila, ¿verdad? Segmentar tu lista te permite enviar el mensaje correcto, al público correcto, en el momento correcto. Es la diferencia entre ser el DJ que pone a todos a bailar y el que hace que cambien de estación.

¿Con qué frecuencia debo enviar emails?

Esta es la clásica pregunta del millón, como preguntarte cuántas veces al día debes textear a alguien que te gusta sin parecer desesperado. La verdad es que depende de tu audiencia y de lo que estás ofreciendo. Algunos estudios sugieren que enviar un correo por semana puede ser un buen punto de partida. Pero, oye, si tus suscriptores están enganchados con lo que envías, quizás quieran saber de ti un poco más seguido. La clave está en conocer a tu audiencia y, sobre todo, en no ser ese amigo pesado que manda mensajes cada dos por tres.

¿Cómo puedo evitar que mis emails terminen en la carpeta de spam?

Imagina que estás invitando a gente a tu fiesta pero, en lugar de llegar a su buzón, tu invitación se va directa a la basura. Doloroso, ¿eh? Para evitar que tus emails acaben en el olvido del spam, asegúrate de que tus suscriptores hayan optado por recibir tus correos, evita palabras que suenen muy a «¡Compra ya!», y mantén tu lista de correo limpia y actualizada. Ah, y no te olvides de incluir siempre una opción fácil y visible para darse de baja.

¿Qué contenido debería incluir en mis emails?

Aquí es donde dejas brillar tu creatividad. Piensa en tus emails como pequeños regalos de contenido que tus suscriptores están emocionados por abrir. Desde tutoriales que solucionen un problema específico hasta historias detrás de tus productos o servicios, lo que compartas debe aportar valor y ser interesante para quien lo recibe. ¿Un truco? Incluye contenido visual como videos o imágenes atractivas que pueden aumentar tus tasas de clic.

¿Cómo sé si mi estrategia de email marketing está funcionando?

¡Datos, datos y más datos! Las métricas son tus mejores amigas aquí. Desde la tasa de apertura hasta el CTR y la conversión, cada número te cuenta una historia sobre lo que funciona y lo que no. Si tu tasa de apertura es alta, vas por buen camino. Si tu CTR no está donde esperabas, quizás necesites ajustar tu llamado a la acción o el contenido de tus emails. Recuerda, el email marketing es un arte que se perfecciona con práctica y atención a lo que tus números te dicen.